Halloween, esa celebración celta que se celebra el día 31 de octubre de todos los años desde hace algún tiempo. Dicen los antiguos que durante esta fecha los espiritus de los muertos pueden regresar a la tierra para caminar entre los vivos y para evitar que posean algún cuerpo los vivos debían disfrazarse de espectros (no de vampiros, no de franktesteins, no de momias y menos de sextuiteras).
Durante mucho tiempo se han escuchado mitos y leyendas sobre esta celebración del norte de Europa, de las más socorridas es que la "Noche de Brujas" sea esa fecha donde las expertas en hechicería celebran el mayor aquelarre del año para contactar al señor de los infiernos. Otras leyendas dicen que los adoradores de Satanas hacen de está fecha el equivalente de Navidad con rituales y sacrificios humanos.
Alguna vez yo escuché que en estas fechas invariablemente debía correr la sangre, más especificamente debía haber una muerte durante la celebración para que las energias que deambulaban pudieran satisfacer su sed y aquí es donde entra mi historia. Hace unos 21 años durante el Halloween me toco estar a cargo de mis hermanos menores ya que mis padres debían trabajar ambos durante la tarde-noche. Yo a mis grandiosos 12 años ya no me sentía en edad de ponerme algo a manera de disfraz y salir a pedir dulces con los vecinos, en cambio mis hermanos si fueron a la recolección de dulces con sus amigos.
En aquel entonces viviamos en una unidad habitacional, es decir, manzanas consituidas por edificios departamentales, a pesar de la gran cantidad de personas que viviamos ahi (la colonia no había sido terminada aún) los chismes corrían demasiado rápido. De repente estando yo en mi casa escucho que alguién grita que un niño había sido atropellado en una de las avenidas principales, al parecer intentó ganarle el paso a un autobus de transporte público: No pude sino pensar lo peor. Yo conocía a mis hermanos y lo impulsivos que eran para cruzar las calles.
Imaginen esto: tienen 12 años, estan solos, no hay un familiar adulto que viva en las cercanias y posiblemente uno de tus hermanos menores está muerto. No es algo divertido. Salí lo más rápido que pude a buscar donde había sido el accidente, no sabía que iba a hacer solo tenía que asegurarme que no fuera alguno de mis hemanos. Al llegar vi que el autobús estaba detenido, alrededor del mismo había muchas personas ahí alcancé a escuchar que había pasado. Un niño que vivía en un departamento enfrente de donde transitaba el camión salió corriendo por una pelota con la que estaba jugando fútbol, y en ese momento fué cuando pasó el terrible accidente.
Ya una vez que escuché esto me tranquilicé y comencé como cualquier otro especimen de nuestra rama evolutiva a curiosear por ahí, me toco ver algo en el piso a unos metros de donde estaba el autobus, no recuerdo haber visto el cuerpo del niño pero sé que lo qué ví pertenecía a él.
No sé que tan cierto sea que de alguna forma invariablemente se derrame sangre en Halloween, pero este recuerdo me hizo estar convencido de ello por varios años.
Durante mucho tiempo se han escuchado mitos y leyendas sobre esta celebración del norte de Europa, de las más socorridas es que la "Noche de Brujas" sea esa fecha donde las expertas en hechicería celebran el mayor aquelarre del año para contactar al señor de los infiernos. Otras leyendas dicen que los adoradores de Satanas hacen de está fecha el equivalente de Navidad con rituales y sacrificios humanos.
Alguna vez yo escuché que en estas fechas invariablemente debía correr la sangre, más especificamente debía haber una muerte durante la celebración para que las energias que deambulaban pudieran satisfacer su sed y aquí es donde entra mi historia. Hace unos 21 años durante el Halloween me toco estar a cargo de mis hermanos menores ya que mis padres debían trabajar ambos durante la tarde-noche. Yo a mis grandiosos 12 años ya no me sentía en edad de ponerme algo a manera de disfraz y salir a pedir dulces con los vecinos, en cambio mis hermanos si fueron a la recolección de dulces con sus amigos.
En aquel entonces viviamos en una unidad habitacional, es decir, manzanas consituidas por edificios departamentales, a pesar de la gran cantidad de personas que viviamos ahi (la colonia no había sido terminada aún) los chismes corrían demasiado rápido. De repente estando yo en mi casa escucho que alguién grita que un niño había sido atropellado en una de las avenidas principales, al parecer intentó ganarle el paso a un autobus de transporte público: No pude sino pensar lo peor. Yo conocía a mis hermanos y lo impulsivos que eran para cruzar las calles.
Imaginen esto: tienen 12 años, estan solos, no hay un familiar adulto que viva en las cercanias y posiblemente uno de tus hermanos menores está muerto. No es algo divertido. Salí lo más rápido que pude a buscar donde había sido el accidente, no sabía que iba a hacer solo tenía que asegurarme que no fuera alguno de mis hemanos. Al llegar vi que el autobús estaba detenido, alrededor del mismo había muchas personas ahí alcancé a escuchar que había pasado. Un niño que vivía en un departamento enfrente de donde transitaba el camión salió corriendo por una pelota con la que estaba jugando fútbol, y en ese momento fué cuando pasó el terrible accidente.
Ya una vez que escuché esto me tranquilicé y comencé como cualquier otro especimen de nuestra rama evolutiva a curiosear por ahí, me toco ver algo en el piso a unos metros de donde estaba el autobus, no recuerdo haber visto el cuerpo del niño pero sé que lo qué ví pertenecía a él.
No sé que tan cierto sea que de alguna forma invariablemente se derrame sangre en Halloween, pero este recuerdo me hizo estar convencido de ello por varios años.
Este post cumple un año, nada mas que en otro espacio.
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